En Chile los empresarios pierden el control de 30 años

Los grandes propietarios están inseguros, sus políticos carecen de la anterior aprobación electoral.

En octubre de 2019 el orden perdió el control de las calles en lucha y tuvo que ofrecer una redacción nueva de la constitución. En mayo de 2021 quedó sin el servicio del aparato político.

Conservan su poder económico, mediático, en los partidos derrotados; su relación con los funcionarios del mecanismo militar que ya han incurrido en conductas que muestran su inclinación.

La vieja derecha habla preocupada del derecho de propiedad y la nueva de un consenso reformista.

La situación presente se define en dos escenarios: Los enfrentamientos en la asamblea de convencionales. La elección a fin de año de presidente de la república y de parlamentarios.

El problema de fondo debería ser mantener el sistema reformándolo o establecer un proceso para ir a otro. Hasta ahora la sostenibilidad y las crisis del futuro están fuera de los temas de los bloques chilenos.

La CIA los puso en el escritorio de Biden hace algunas semanas (*).

 

Un trabajo de la CIA sobre posibles futuros lleva el título La disrupción global más significativa desde la Segunda Guerra Mundial.

¿Cuáles serán los principales desafíos, el climático o el demográfico? ¿Qué países conducirán el rumbo del Planeta? ¿La inteligencia artificial es la solución? ¿Habrá agua para todos? ¿La erosión de las democracias es ineluctable?

Cambio climático. Para la CIA, de aquí a 2040, nadie podrá escapar a sus consecuencias con todo lo que ello implica: disponibilidad y gestión de recursos, crisis alimentaria, con la consiguientes tensiones sociales y migratorias.

Inteligencia artificial. Millones de empleos de baja calificación podrían desaparecer en poco tiempo, dejando un enorme ejército de desocupados. 

Una inexorable erosión de nuestras democracias, incapaces de responder a las preocupaciones ciudadanas sobre la corrupción, el monopolio de las élites, su capacidad de proveer servicios y el aumento creciente de las desigualdades fuente de tensiones sociales.

Todas las formas de poder afrontarán una pérdida de confianza generando crisis de gobernanza en un contexto de pérdida de credibilidad de los organismos internacionales y de fracaso de la cooperación internacional, como lo puso de manifiesto la pandemia.

Salud síquica de la población. La CIA calcula que el costo de las enfermedades mentales podría alcanzar la vertiginosa cifra de 16 billones de dólares.

Los expertos sitúan el conjunto de estas proyecciones en un contexto de alta competición por la influencia global, la cual podría alcanzar su nivel más alto desde la Guerra Fría, con el duelo entre China y Estados Unidos.

 

¿Debe el discurso/propuesta del izquierdo/progresismo dejar fuera de una constitución y su posible gobierno las evidencias de futuro para limitarse a los problemas inmediatos?

Lo necesario hoy es iniciar un proceso a una nueva civilización. Fidel lo veía así.

¿Qué posibilidades hay en Chile?

 

La elección de convencionales dio representación a las dos derechas y al pacto antineoliberal.  

Un número importante son independientes protagonistas de las luchas de octubre del 2019 opuestos a los partidos políticos que expresan demandas sectoriales.

Los convencionales indígenas se centran en sus reivindicaciones históricas.

 

Lo que pasará en la convención es impredecible. En la alianza antineoliberal no se descarta un acuerdo electoral con partidos de la nueva derecha.

 

Ser parte en la construcción ciudadana de cambios radicales requiere ideales y esa batalla no se ha dado. El 57% de los ciudadanos no quiso votar.

 

Referencia

 

(*) https://www.rfi.fr/es/am%C3%A9ricas/20210521-el-mundo-en-2040-seg%C3%BAn-la-cia

 

Por Rómulo Pardo Silva