Senado aprobó reforma que habilita nuevo proceso constituyente; pasa a la Cámara

Con 40 votos a favor, 4 en contra y 2 abstenciones la Sala del Senado despachó en particular el articulado del proyecto de reforma constitucional que establece un procedimiento para la elaboración y aprobación de una nueva Constitución y que es fruto del «Acuerdo Por Chile».

 

Cabe recordar que este miércoles fue la segunda jornada en que la Sala analizó el tema y si bien se presentó casi un centenar de indicaciones, los comités acordaron una fórmula para poder agruparlas por autor y que cada uno de ellos pudiera explicar su contenido. En la sesión de este martes se aprobó en general la iniciativa.

 

Todas las indicaciones puestas en votación fueron rechazadas:

 

La primera en hacer uso de la palabra fue la senadora Carmen Gloria Aravena, quien propuso derogar los artículos referidos al antiguo proceso constituyente, entre otras materias.

 

El senador Juan Castro Prieto planteó la necesidad de un plebiscito de entrada para el proceso y fortalecer la familia y los símbolos patrios.

 

Por su parte, la senadora Fabiola Campillai propuso que el Consejo Constitucional fuera de 155 miembros, elegidos de acuerdo a las normas de la Cámara de Diputados.

Los  senadores Esteban Velásquez y Alejandra Sepúlveda plantearon, entre otras medidas, que el plebiscito de salida se cambiara para marzo de 2024 a objeto de dar mayor tiempo al Consejo para hacer su trabajo.

 

En tanto, el senador Karim Bianchi propuso que la Comisión Experta solo tuviera un rol consultivo y por consiguiente rebajar la dieta de sus integrantes, además de bajar a 4/7 los quórums de aprobación de la propuesta y postergar para marzo de 2024 el plebiscito de salida.

 

Por su parte, las indicaciones presentadas por los senadores Yasna Provoste y Francisco Huenchumilla propusieron una indicación para que el mecanismo de corrección de paridad se sustentara en los porcentajes de votos obtenidos.

 

El senador Rojo Edwards explicó cada una de sus indicaciones, las que se votaron por separado siendo rechazadas en su totalidad.

 

En lo fundamental, apuntaban a establecer un plebiscito de entrada, a modificar la fecha de esa elección, a permitir que los partidos en formación pudieran llevar candidatos independientes, para bajar el sueldo a los consejeros constitucionales,  que los integrantes de la Comisión Experta sean elegidos por 2/3, que los integrantes del Comité Técnico de Admisibilidad no militen en partidos políticos e incluir en los fundamentos o denominados «bordes» el rol de los padres en la educación y que en caso de que se rechace la nueva Constitución no se vuelva a intentar en el tema en un año más.

 

Finalmente la senadora Paulina Núñez planteaba que el Servel sea incluido como un órgano autónomo al igual que el Banco Central y la Contraloría.