Condena de 15 años de prisión por ataques incendiarios para Ernesto Llaitul; alegan nuevo montaje

El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Los Ángeles emitió un veredicto trascendental en un caso de ataques incendiarios ocurridos en septiembre de 2021 en el sector rural Paraguay de la comuna de Los Ángeles. Esta decisión judicial ha puesto el foco en una serie de hechos que han conmocionado a la región del Bío Bío en Chile.

Los condenados, entre ellos Esteban Ignacio Henríquez Riquelme, Ernesto Lincoyam Llaitul Pezoa (hijo del líder de la CAM Héctor Llaitul), Ricardo Delgado Reinao, Roberto Villouta Alcamán y Eduardo Mauricio Cornejo Vidal, enfrentaron un veredicto condenatorio por su implicación en estos incidentes a una pena de 15 años y tres meses de cárcel. Vale destacar que Héctor Llaitul se encuentra en prisión desde agosto de 2022 por delitos relacionados con robo de madera y la Ley de Seguridad Interior del Estado, presumiblemente vinculados a ataques incendiarios.

El tribunal, compuesto por las magistradas Marisol Panes Viveros, Constanza Naranjo Alé y el juez Christian Osses Baeza, llegó a una resolución unánime, declarando la culpabilidad de los acusados en delitos que incluyen dos homicidios frustrados, un incendio consumado y otro tentado. Además, se determinó que formaban parte de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), una organización que busca la reivindicación territorial utilizando medios violentos.

El veredicto judicial subraya que los condenados planificaron minuciosamente los ataques incendiarios a camiones forestales, desplazándose desde distintas regiones hasta la cabaña La Isla, donde se llevaron a cabo los hechos. La señal de los teléfonos celulares de los acusados fue rastreada en la zona del atentado, fortaleciendo así la evidencia de su implicación en los delitos.

El tribunal consideró que la suma de estos indicios permitía «presumir fundadamente» que los acusados actuaron coordinadamente para cometer los delitos imputados, que incluyen dos homicidios frustrados, incendio consumado y tentado. Eduardo Mauricio Cornejo Vidal fue condenado por complicidad en los delitos de incendio consumado y tentado.

La audiencia de comunicación de la sentencia está programada para el próximo jueves 16 de noviembre, donde se conocerá la pena que enfrentarán los condenados. Este fallo judicial ha desatado un debate sobre la violencia y los reclamos territoriales en Chile, especialmente en el contexto de la Coordinadora Arauco Malleco, una organización involucrada en la lucha por la recuperación de tierras. La sentencia será un hito crucial en el proceso legal y social que rodea estos eventos.

Un nuevo montaje

Sin embargo, este veredicto ha generado un fuerte debate sobre la justicia y los derechos de la comunidad mapuche en Chile.

El comunicado emitido por los familiares de los condenados señala que durante el juicio no se presentaron pruebas sólidas que demostraran la culpabilidad de los acusados. A pesar de allanamientos a una cabaña y al vehículo en el que se transportaban dos de los acusados, no se encontraron armas, líquido acelerante ni pasamontañas. Esto plantea interrogantes sobre la validez de las pruebas presentadas en el juicio y si se cumplen los estándares mínimos probatorios.

Los familiares argumentan que esta condena es más política que legal, sosteniendo que sus seres queridos fueron declarados culpables no por evidencia de los hechos, sino por su identidad como mapuches, por su afiliación a la Coordinadora Arauco Malleco y por su respaldo a una perspectiva política particular. Esto plantea cuestionamientos sobre la equidad y la justicia en el sistema legal chileno.