En medio de un escenario legal complicado y un ambiente mediático que no deja de sorprender, la figura de Camila Polizzi ha vuelto a captar la atención pública. Esta vez, no por sus controversiales pasos en la política, sino por su incursión en el mundo del contenido erótico exclusivo a través de la plataforma Arsmate.
Este jueves se desvelaron los ingresos que Polizzi estaría generando mediante la venta de su contenido exclusivo en esta plataforma, tras su llegada a principios de este mes. Recordemos que la excandidata a diputada se encuentra actualmente bajo arresto domiciliario total, enfrentando cargos por estafa y fraude al fisco en el marco del sonado Caso Convenios, específicamente en la arista de la Fundación En Ti en la región del Bío Bío.
A pesar de su situación legal, el 2 de febrero pasado, Polizzi anunció a través de su cuenta de Instagram la venta de contenido presumiblemente dirigido a un público adulto en el «Only Fans chileno». Este movimiento no pasó desapercibido y, días después, la imputada agradeció a sus seguidores por el apoyo en la compra de su contenido, según un video filtrado en redes sociales.
Recientemente, se han revelado detalles más concretos sobre el éxito de esta incursión. Según lo informado por Julio César Rodríguez en Contigo en la Mañana de CHV, Polizzi ha subido un total de 14 contenidos audiovisuales, entre videos y fotos, a su cuenta de Arsmate. La suscripción a su contenido tiene un precio de 24 dólares, equivalente a aproximadamente $23 mil pesos chilenos por usuario. Con cerca de 700 seguidores, se estima que Polizzi ha obtenido ganancias de hasta $15 millones en menos de dos semanas.
Ante este escenario, Paola Rojas, gerenta de operaciones de Arsmate, ha respaldado la decisión de Polizzi de unirse a la plataforma, calificándola como «sumamente acertada». Según informó Radio Bío Bío, Rojas resaltó que la imputada puede aprovechar el boom mediático para generar rentabilidad a través de su plataforma, asegurando que lo que está haciendo no vulnera su medida cautelar y no constituye una actividad ilegal.
Sin embargo, esta situación no ha estado exenta de críticas. Diversas figuras políticas, incluidos algunos diputados, han cuestionado la actuación de Polizzi, calificándola como una «burla» debido a sus cargos legales pendientes. Han pedido una reevaluación de su medida cautelar en medio de este nuevo emprendimiento.
La historia de Camila Polizzi sigue siendo un reflejo de los complejos entrelazamientos entre la esfera pública, el mundo del entretenimiento y el ámbito judicial en el Chile contemporáneo. Mientras algunos la ven como una emprendedora astuta, otros la perciben como una figura controvertida que desafía las convenciones sociales y legales. En medio de todo esto, su presencia en Arsmate sigue generando titulares y alimentando debates en todo el país.
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