Poder y Política

Manouchehri denuncia y reitera vínculos entre Kast y militante republicano acusado de liderar banda criminal

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El diputado socialista Daniel Manouchehri encendió la polémica al denunciar públicamente los vínculos entre el excandidato presidencial José Antonio Kast y Francisco San Martín, militante del Partido Republicano formalizado por liderar una red internacional dedicada al robo de cables de cobre. La acusación se produjo durante un panel televisivo donde Manouchehri confrontó al diputado republicano Álvaro Carter, generando un tenso intercambio.

Manouchehri mostró imágenes de Kast compartiendo una cena con San Martín, quien también fue precandidato a alcalde, y emplazó al Partido Republicano a transparentar su relación con el ahora imputado. “Si aquí pueden ver, él (San Martín) aparece en una cena en la cabecera con el candidato presidencial José Antonio Kast (…) Esta persona hoy día está en prisión, fue detenido por encabezar una banda, una mafia millonaria respecto del robo de cobre”, afirmó el parlamentario socialista, destacando además que según reportajes de prensa, varios diputados habrían frecuentado la casa de San Martín.

La denuncia no quedó solo en lo mediático. Manouchehri, junto a la diputada Daniella Cicardini, presentó un oficio de fiscalización al Servicio Electoral (Servel) para determinar si San Martín realizó aportes a campañas electorales o partidos políticos en la última década.

Durante el panel, Carter desestimó las acusaciones, acusando a Manouchehri de actuar con “bajeza” al exhibir fotografías y deslizar responsabilidades. “Venir a mostrar una foto y culpar a alguien es de una bajeza impresionante, sea decente en ese aspecto”, dijo el parlamentario republicano. Manouchehri, en respuesta, defendió su denuncia: “No señor Carter. Los que se callan ante la corrupción son los indecentes (…) Estos son datos fácticos que son irrefutables”.




La controversia reaviva el debate sobre los filtros al interior de los partidos políticos y sus vínculos con figuras investigadas por delitos graves. Mientras el Partido Republicano guarda silencio, desde la oposición exigen explicaciones y transparencia ante un caso que ya golpea la imagen del bloque.



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