Poder y Política Portada

Lagos Weber responsabiliza a la disputa electoral de la derecha por el rechazo al Presupuesto 2026

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 55 segundos

El senador Ricardo Lagos Weber (PPD) atribuyó este martes el rechazo casi total de las partidas del Presupuesto 2026 en la comisión mixta a una estrategia electoral de la oposición, que busca —según dijo— evitar costos políticos antes de los comicios del próximo 16 de noviembre.

En conversación con el programa Al Pan Pan de El Mostrador TV, el parlamentario aseguró que “la oposición está dividida con tres candidaturas y tres listas parlamentarias diferentes. Entonces, para no pagar el costo de aparecer aprobándole los proyectos al gobierno, la derecha completa decidió rechazar el Presupuesto para que no los traten después como la derechita cobarde o entregada”.

“Se subieron al carro de los extremistas”

El senador por Valparaíso, integrante de la comisión mixta de Presupuesto, añadió que este comportamiento responde a la presión interna que ejercen los sectores más duros de la derecha sobre sus socios políticos.
“A quien le faltó pericia fue a la oposición, que por no atreverse a pagar costos con la extrema derecha se subió al carro de los extremistas rechazando todo”, señaló Lagos Weber.

El legislador enfatizó que la decisión opositora tendrá consecuencias inmediatas en la discusión legislativa, ya que los diputados no podrán presentar indicaciones cuando el proyecto regrese a la Cámara. “Un diputado sin tener la posibilidad de presentar indicaciones, sobre todo en un proyecto como el Presupuesto, es como que le cortaran las manos”, afirmó.




El trasfondo electoral

Para Lagos Weber, la oposición no actuó motivada por diferencias técnicas o programáticas, sino por razones electorales evidentes. “Hay elecciones el domingo 16 de noviembre, no le demos más vueltas ni nos engañemos”, dijo, aludiendo a la posibilidad de que los partidos de derecha no quisieran exponerse a críticas de sus bases o del bloque republicano.

El senador también recordó una entrevista reciente del presidente de Renovación Nacional, Rodrigo Galilea, quien reconoció que los acuerdos presupuestarios suelen alcanzarse después de los procesos electorales. “Lo dijo tranquilo, operado de los nervios —ironizó Lagos Weber—: ‘esperemos a que pase el 16 de noviembre y ahí nos pondremos de acuerdo’”.

Un revés para el gobierno y para la institucionalidad presupuestaria

El rechazo de 24 partidas del Presupuesto fiscal para 2026, en una sola sesión, representa uno de los mayores reveses para el gobierno de Gabriel Boric en materia fiscal. También constituye un golpe al ministro de Economía y Hacienda, Nicolás Grau, quien había encabezado la negociación.

Desde el oficialismo, se teme que la estrategia de la oposición paralice programas sociales clave y retrase la ejecución presupuestaria de los primeros meses del próximo año.
En tanto, desde la derecha se argumenta que el rechazo busca “forzar un nuevo diálogo” con el Ejecutivo tras las elecciones, aunque sin precisar si mantendrán la misma postura cuando el proyecto retorne a la Cámara de Diputados.

Escenario incierto

La tramitación del Presupuesto 2026 quedó así en un escenario político enrarecido, cruzado por la campaña presidencial y parlamentaria.
Mientras el oficialismo acusa un uso electoral del Congreso, la oposición sostiene que el gobierno presentó un presupuesto “irreal e inflado”.

Para Lagos Weber, sin embargo, la raíz del conflicto está clara: “Este no fue un debate técnico ni político, fue un acto de campaña. Se rechazó todo para enviar una señal de fuerza antes de la elección. Pero la consecuencia es grave: se afectó el funcionamiento institucional del Congreso y se privó a la Cámara de su facultad de incidir en el gasto público”.



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *