
Bloque de Organizaciones Populares llama a organizarse frente al avance reaccionario
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Diversas organizaciones juveniles y populares difundieron esta semana una declaración política en la que llaman a fortalecer la organización social y territorial frente al escenario abierto tras la derrota electoral del oficialismo y el avance de la derecha y la ultraderecha en Chile.
Bajo el nombre Bloque de Organizaciones Populares, el colectivo plantea que el país atraviesa un momento crítico, marcado por problemas estructurales que afectan cotidianamente a amplios sectores de la población: bajos salarios, alza del costo de la vida, crisis habitacional, precarización del sistema de salud, endeudamiento estudiantil y una vejez empobrecida. Según el texto, estas condiciones no serían hechos aislados, sino el resultado de décadas de administración del modelo capitalista por distintos gobiernos, “con diferentes discursos, pero al servicio de los mismos intereses”.
Balance crítico del ciclo abierto en 2019
La declaración sitúa el alzamiento popular de octubre de 2019 como un punto de inflexión histórico, al que califican como el momento más alto de un ciclo de luchas iniciado en los años 2000. En ese período —señalan— la movilización social logró poner en cuestión las bases del poder político y económico. Sin embargo, critican que gran parte de esa energía transformadora fue canalizada hacia salidas institucionales que no cumplieron las expectativas de cambio profundo.
En ese marco, el documento es especialmente crítico del gobierno de Gabriel Boric, al que definen como un proyecto progresista que capitalizó electoralmente discursos feministas, ecologistas y populares, pero que en el ejercicio del poder terminó —según el Bloque— administrando el sistema existente y alineándose con los sectores que concentran la riqueza.
Para las organizaciones firmantes, este proceso no solo generó frustración entre quienes confiaron en ese proyecto, sino que también evidenció una debilidad central: la ausencia de una organización popular sólida, articulada y con dirección política propia. En ese vacío —afirman— la rabia social tiende a fragmentarse y transformarse en individualismo.
Crítica transversal al escenario político
El Bloque de Organizaciones Populares sostiene que, en este contexto, no resulta sorprendente el avance de la extrema derecha, que intenta presentarse como una respuesta al malestar social mediante promesas de orden y seguridad basadas en la mano dura. Sin embargo, el texto rechaza que esa alternativa —encarnada en figuras como José Antonio Kast— represente una solución real a los problemas del pueblo.
La crítica se extiende también al conjunto del sistema político. En una afirmación tajante, el documento señala que “ni Kast, ni Jara, ni ningún otro gobierno dentro de este sistema” resolverá las condiciones de fondo que afectan a la clase trabajadora, en tanto todos disputarían únicamente la administración del poder dentro del mismo marco estructural.
Desde esta perspectiva, conceptos como libertad, orden y seguridad serían utilizados de manera instrumental, al servicio de los dueños del poder económico, sin modificar las condiciones materiales de vida de la mayoría.
La apuesta por la organización desde abajo
Uno de los ejes centrales del llamado es la reivindicación de la organización popular como único camino para conquistar derechos. El texto enfatiza que depositar todas las expectativas en los procesos electorales, sin construir organización social, conduce inevitablemente a derrotas más profundas.
En contraste, las organizaciones proponen reconstruir el tejido social desde los territorios: poblaciones, centros de trabajo, establecimientos educacionales, comités de vivienda y asambleas locales. Según el Bloque, solo un pueblo organizado puede enfrentar de manera efectiva los retrocesos sociales y políticos.
“La historia demuestra que ningún derecho ha sido regalado”, afirman, recordando que las conquistas sociales han sido fruto de la lucha colectiva y no de concesiones desde el poder.
Juventud, autocrítica y desafío político
La declaración incorpora también un llamado a la autocrítica dentro del campo popular y clasista, reconociendo la necesidad de combatir el individualismo y reconstruir la solidaridad de clase. Asimismo, subraya que la disputa actual no es solo material, sino también ideológica, denunciando a quienes —según el Bloque— han promovido salidas electorales que terminan desorientando al pueblo.
Aunque se trata de un espacio aún minoritario dentro del panorama político nacional, el pronunciamiento destaca por provenir de organizaciones juveniles que buscan reposicionar la organización popular como alternativa frente a la crisis de representación y al avance reaccionario.
“El desafío es grande, pero también lo es nuestra historia de lucha”, concluye el documento, llamando a fortalecer la unidad, la combatividad y la organización consciente como herramientas para enfrentar el nuevo ciclo político.





