
Chile abre sus puertas a refugiados de Gaza, Siria y Afganistán en medio de la crisis humanitaria
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El Gobierno confirmó este sábado la llegada a Chile de un primer grupo de 68 refugiados palestinos provenientes de la Franja de Gaza, de los cuales 36 son niños, niñas y adolescentes. Se trata de la primera parte de un operativo que contempla la acogida de 113 personas que huyen de zonas de conflicto en Medio Oriente, en un proceso encabezado por la Cancillería y coordinado con otros ministerios, en particular Interior y Mujer.
La iniciativa, que se mantenía bajo estricta reserva hasta ahora, fue revelada en oficios reservados fechados entre el 11 y el 27 de agosto y enviados al Servicio Nacional de Migraciones (Sermig) y a la Policía de Investigaciones (PDI).
Un operativo humanitario bajo estricta coordinación
Entre los refugiados que serán acogidos en Chile se encuentran 76 palestinos de Gaza, 34 ciudadanos sirios y tres mujeres afganas. El Ministerio de Relaciones Exteriores informó que se han emitido 53 salvoconductos para los palestinos y visas de permanencia transitoria para todos los beneficiados, además de solicitar la exención del pago de derechos consulares por la naturaleza humanitaria del proceso.
El Sermig remitió listados a la PDI e Interpol para la verificación de antecedentes, mientras que la Cancillería coordinó gestiones con la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI). El traslado del grupo se inició el 10 de septiembre, con rutas terrestres y aéreas, siempre acompañados por personal consular chileno.
Boric: “Sus vidas corrían peligro”
El Presidente Gabriel Boric celebró el arribo en un mensaje difundido por X (ex Twitter):
“En un complejo operativo que tomó meses, hemos hoy recibido exitosamente a 68 ciudadanas y ciudadanos palestinos provenientes de Gaza, 36 de ellos niños, niñas y adolescentes, cuya vida corría peligro ante el genocidio en curso. Chile hace honor a su himno patrio”.
La Cancillería complementó señalando que “esta acción se enmarca en el firme compromiso de nuestro país con el derecho internacional humanitario y fue posible gracias al esfuerzo coordinado con organizaciones internacionales”.
Por razones de seguridad y respeto a la privacidad, el Gobierno evitó entregar detalles sobre la ubicación o condiciones de residencia de las familias en Chile.
Un gesto político y humanitario
La llegada de los refugiados ocurre en paralelo a una creciente ola de indignación internacional por las ofensivas militares en Gaza, donde solo el viernes pasado murieron 47 personas, cinco de ellas mientras esperaban comida, según informaron agencias internacionales. También coincide con la aprobación en la Asamblea General de la ONU de una resolución a favor de la creación de un Estado palestino, respaldada por una amplia mayoría de países.
El gesto del Gobierno chileno no es solo humanitario, sino también político. Chile alberga a la comunidad palestina más numerosa fuera del mundo árabe, y el operativo de acogida refleja tanto un compromiso con esa comunidad como con los principios universales de protección a quienes huyen de guerras y persecuciones.
Entre la solidaridad y la hostilidad
El arribo de refugiados suele enfrentar también tensiones en el debate político interno. En un país donde sectores de derecha han insistido en la narrativa de la “crisis migratoria” vinculada a la frontera norte, la acogida humanitaria puede convertirse en nuevo terreno de disputa.
Pero más allá de la controversia, lo cierto es que las imágenes de familias palestinas entrando al aeropuerto, exhaustas tras meses de asedio, reafirman un principio elemental: la vida humana debe estar por encima de las fronteras, los prejuicios y las disputas electorales.
La llegada de refugiados de Gaza, Siria y Afganistán recuerda que Chile puede y debe ser un refugio en tiempos de catástrofe humanitaria. El país enfrenta sus propios dilemas internos, pero su gesto hacia estas familias vulnerables confirma que todavía es posible hacer política desde la solidaridad y la dignidad. En medio de los horrores de la guerra, Chile abre una puerta y dice presente.





