Nunca por un nazi ni un fascista: la advertencia de la agrupación judía Diana Arón contra la candidatura de Kast
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La agrupación judía Diana Arón emitió un enérgico comunicado en el que expresa su «profunda preocupación» ante la candidatura presidencial de José Antonio Kast. Bajo el título “Nunca por un nazi ni un fascista”, el colectivo sostiene que un eventual apoyo al abanderado de la extrema derecha “vulnera la memoria de la Shoá” y representa un retroceso moral para el país.
La declaración alude directamente al historial familiar del candidato y a su posición frente a los crímenes de la dictadura chilena y del nazismo, planteando que la defensa de valores democráticos resulta incompatible con su proyecto político.
El peso de la historia: el pasado nazi de Michael Kast
Uno de los puntos centrales del comunicado refiere al padre del candidato, Michael Kast, quien —según investigaciones históricas y documentos desclasificados— sirvió en el Ejército alemán en los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial y se afilió de manera voluntaria al Partido Nacionalsocialista. La agrupación subraya que estos antecedentes han sido negados reiteradamente por José Antonio Kast, lo que consideran una falta grave de transparencia y una forma de negacionismo histórico.
Complicidades con la dictadura en Chile
La organización también recuerda el rol que la familia Kast desempeñó durante la dictadura civil-militar. Apunta especialmente a Miguel Kast, hermano del candidato, quien llegó a ser ministro del régimen y una de sus figuras ideológicas clave. Asimismo, señala la complicidad del padre con los crímenes cometidos en Paine, una de las comunas más golpeadas por la represión.
Defensa de violadores de derechos humanos
La agrupación Diana Arón enfatiza que José Antonio Kast ha defendido pública y reiteradamente a condenados por delitos de lesa humanidad, incluyendo visitas al penal de Punta Peuco. En particular, mencionan el caso de Miguel Krassnoff, brigadier del Ejército condenado por torturas, asesinatos y desapariciones, entre ellos la detención, tortura y muerte de la periodista Diana Arón, militante del MIR, embarazada al momento de su captura.
Krassnoff —recuerda el comunicado— era hijo y nieto de militares cosacos involucrados en pogromos y crímenes antisemitas durante la Segunda Guerra Mundial. La agrupación sostiene que la reivindicación de una figura de estas características revela la distancia ética del candidato respecto de los principios democráticos y humanitarios.
Xenofobia y alianzas internacionales
Otro eje de preocupación es la retórica xenófoba desplegada por Kast durante su campaña, la cual —según denuncian— estigmatiza a migrantes y reproduce patrones históricos de odio contra minorías. A ello suman las alianzas de Kast con sectores de la extrema derecha internacional, movimientos que han legitimado discursos de raíz antisemita y han promovido activamente ideologías fascistas en distintas partes del mundo.
Memoria, democracia y responsabilidad ética
La agrupación judía insiste en que el problema no es la herencia familiar, sino la actitud del candidato frente a ella. “No se trata de culpas heredadas, sino de responsabilidades presentes”, afirman. El colectivo sostiene que la ética democrática exige coherencia con la verdad, rechazo al negacionismo y condena clara de los genocidios y los crímenes de lesa humanidad.
El comunicado alerta sobre una campaña marcada por “frialdad, cinismo, desprecio por el otro” y por rasgos que consideran compatibles con los discursos autoritarios de los fascismos del pasado. Respaldar políticamente a un candidato que —sostienen— no ha condenado con claridad el legado nazi de su padre equivaldría a banalizar la memoria de las víctimas de la Shoá.
Llamado al país: no traicionar la memoria
En su cierre, la organización realiza un llamado explícito tanto a la comunidad judía como a toda la ciudadanía chilena. Votar por Kast, afirman, “no es solo una preferencia política”, sino un retroceso moral y social que desconoce las lecciones más dolorosas de la historia. “La preservación de la memoria, el respeto irrestricto a los derechos humanos y la defensa de la democracia —señalan— son garantías de convivencia y seguridad”.
Desde la memoria de todas las víctimas del nazismo, el fascismo y la dictadura chilena, la agrupación reafirma su posición con una frase contundente: “Nunca más. No a José Antonio Kast.”
