Dauno Totoro, candidato distrito 10: «La única forma de resolver esa tensión será en la medida en que se retome el camino de la lucha»
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Dauno Totoro, el joven dirigente del Partido de los Trabajadores Revolucionarios (PTR), activista por los derechos humanos que ha tenido una destacada participación en el movimiento popular que ha remecido el país desde octubre del 2019, levanta su candidatura a la convención constituyente (CC) por la lista A darlo vuelta todo en el distrito 10.
La participación de Dauno y de todos y todas las candidatas de A darlo Vuelta Todo canaliza las demandas de la revuelta popular, las que con gran seguridad no serán respondidas por la CC, instancia nacida como producto a la medida de los intereses de la clase política y los poderes económicos para impedir cambios reales en las estructuras del mercado y las instituciones de estado chileno. Es por eso que la candidatura de Dauno expresa las críticas del pueblo movilizado ante la CC, asamblea que pese a su actual diseño tiene ciertas posibilidades de ser alterada. Para ello, nuevas movilizaciones y una fuerza anticapitalista al interior de la CC pueden abrir espacios.
Con las candidaturas ya inscritas, cómo ves las posibilidades de la lista A darlo vuelta todo, que lleva 55 candidaturas en 10 distritos. ¿Cómo se organizará el PTR y las organizaciones de trabajadorxs y sobre qué se levantará la campaña en estos escasos tres meses?
Ha sido un largo camino que iniciamos reuniendo firmas para lanzar candidaturas junto a dirigentes sociales independientes y organizaciones como el Movimiento Socialista de las y los Trabajadores.
Lanzamos 55 candidatos/as a la Convención a nivel nacional para mostrar que existe una voz en la izquierda que denuncia el Acuerdo por la paz y que somos claros al decir que todas las conquistas que logremos vendrán de la lucha de las y los trabajadores y el pueblo. Sólo así terminaremos con el saqueo de estos 30 años de transición y 17 de la dictadura.
Para eso junto a mí y a Joseffe van compañeras como Suely Arancibia, de la Agrupación Vencer, María Isabel Martínez, dirigente histórica de las y los profesores, la compañera Valeria Yañez junto a Brisa Gálves, dirigenta de la Federación Nacional Coordinadora de Base de la Salud Pública, quienes levantan en común un comando por el distrito 13 junto a la Asamblea de Base de trabajadores/as del Hospital Barros Luco, donde hemos realizado una larga experiencia de lucha y organización levantando en común el Comité de Salud y Seguridad.
Levantaremos entonces una fuerte campaña desde las bases junto a cientos de activistas, trabajadores/as, estudiantes, dirigentes sociales y políticos.
¿Cuáles son las características de los candidatos de la lista A darlo vuelta todo?
Bueno diría que somos quienes hemos estado donde había que estar, y eso lo digo con mucho orgullo al ver a mis compañeros y compañeras que hoy enfrentan este proceso. Queremos darle continuidad a los grandes motores de la rebelión: el #FueraPiñera y el camino de la huelga general, pero especialmente la lucha por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana para que sea realmente el pueblo el que decida y para tirar abajo la herencia del dictador.
Y junto a esto algo que caracteriza nuestras candidaturas es que buscamos ligarla a los lugares de trabajo, a las asambleas de base, que se liguen con los espacios de discusión y organización como es el caso del Hospital Barros Luco que mencionaba anteriormente.
Nuestra principal ventaja en ese sentido es nuestra consecuencia: vamos y levantamos una alternativa totalmente independiente de los partidos empresariales, de eso nos diferenciamos profundamente también del Partido Comunista y el Frente Amplio que buscan en su horizonte una alianza con estos sectores “progresistas” de la ex Concertación, pero la experiencia pasada nos demuestra que sólo traerá nuevos fracasos como el gobierno de Bachelet.
Tu candidatura compite en el distrito 10 de la Región Metropolitana, posiblemente uno de los más competitivos. ¿Cuáles son tus ventajas en una zona con fuerte peso de la exconcertación, el Frente Amplio y también la derecha, que tiene no pocos municipios, en un distrito en el que compiten independientes conocidos en redes sociales y medios de comunicación?
Yo fui candidato a diputado como independiente el 2017, he hecho prácticamente gran parte de mi vida en el distrito, estudié en la Universidad allí. Además durante la rebelión fui querellado por la Ley de Seguridad Interior del Estado por decir Fuera Piñera, justamente cuando Blumel era Ministro del Interior y encabezaba los días más duros de la represión.
Nuestra principal ventaja en ese sentido es nuestra consecuencia: vamos y levantamos una alternativa totalmente independiente de los partidos empresariales, de eso nos diferenciamos profundamente también del Partido Comunista y el Frente Amplio que buscan en su horizonte una alianza con estos sectores “progresistas” de la ex Concertación, pero la experiencia pasa nos demuestra que sólo traerá nuevos fracasos como el gobierno de Bachelet.
Desde hace meses la izquierda y organizaciones hablan de la trampa de la convención constitucional y el quórum de los 2/3, que le otorga un poder de veto a la derecha y forzará negociaciones con la exconcertación y posiblemente con el PC y el FA. ¿Qué posibilidades existen para superar este nudo, que puede limitar todos los necesarios cambios que las grandes mayorías esperan?
Durante todos estos años y con mayor fuerza en la rebelión hemos luchado por las demandas que octubre planteó en las calles: salud, pensiones, salarios, educación. Pero sabemos que para conquistar esas necesidades debemos enfrentar a los verdaderos dueños del país: los Luksic, Matte, Angelini. Por eso levantamos un programa anticapitalista, partiendo de las demandas de la rebelión pero buscando salidas de fondo, para acabar con este Chile de los capitalistas, planteando la nacionalización de los recursos naturales bajo gestión de sus comunidades y trabajadores, terminar con las AFP, conquistar el reparto de las horas de trabajo entre ocupados y desocupados. Y en ese sentido, la vía que nos dará posibilidades reales de conquistar todos los cambios necesarios que se han exigido en materia de pensiones, salario, educación, será la de retomar el camino de lucha y movilización.
la única forma de resolver esa tensión será en la medida en que se retome el camino de la lucha, lo que abrió la rebelión y especialmente la huelga general del 12 de noviembre, camino que la izquierda parlamentaria abandonó rápidamente: el Frente Amplio sumándose al Acuerdo y el PC entregándole una tregua al gobierno desde la CUT que dura hasta el día de hoy.
El apruebo fue apoyado en el plebiscito por casi el 80 por ciento de la población. Muy pocos observadores estiman que esa proporción se repita en la elección de constituyentes por el uso del mismo diseño y estructura electoral. Sin embargo, es también una realidad que las verdaderas demandas de los y las electoras son aquellas levantadas durante la revuelta popular. ¿Cómo se resuelve esta tensión o contradicción?
Esa me parece una pregunta clave, porque como señalaba, la única forma de resolver esa tensión será en la medida en que se retome el camino de la lucha, lo que abrió la rebelión y especialmente la huelga general del 12 de noviembre, camino que la izquierda parlamentaria abandonó rápidamente: el Frente Amplio sumándose al Acuerdo y el PC entregándole una tregua al gobierno desde la CUT que dura hasta el día de hoy.
Ese camino nos permitirá superar este proceso amañado y restringido y conquistar una verdadera Asamblea Constituyente que sea Libre y Soberana: que ningún poder de este viejo régimen heredado del pinochetismo esté sobre ella. Al servicio de aquello ponemos nuestras candidaturas.
¿Será posible hacer alguna alianza entre sectores anticapitalistas o antineoliberales durante el proceso constituyente para bloquear las negociaciones de la derecha con la exconcertación?
Buscaremos todas las vías para aislar a los neoliberales, no nos cerramos a buscar ese tipo de articulaciones, pero la verdadera superación de los defensores del neoliberalismo no pasará por los pactos en los pasillos de la Convención, sino en las calles con la movilización del pueblo trabajador.
Para esto se necesita con urgencia la unidad más amplia del pueblo trabajador, para enfrentar los ataques del gobierno y los grandes empresarios, y por eso le exigimos permanentemente al Partido Comunista y a las organizaciones que dirigen las principales centrales sindicales del país que rompan su tregua con el gobierno y convoquen a movilizaciones nacionales para enfrentar a Piñera y su represión, cosa que hasta ahora no ha ocurrido.
¿Crees que el movimiento social está vivo y expectante? ¿Qué sucederá si la derecha y los partidos tradicionales logran una sobrerrepresentación?
Claramente la rebelión no fue derrotada. Su “espíritu” podríamos decir que sigue vivo. Las demandas que planteó no han sido resueltas. Pero el Proceso Constitucional fue montado justamente para desviar esa inmensa fuerza hacia la vía institucional, a un terreno controlado por los mismos de siempre.
No hay nada dicho, por eso hay que bregar con más fuerza que nunca por mantener activas las calles en perspectiva de retomar la senda de la movilización que abrió el movimiento de octubre.
¿Todo termina el 11 de abril o es solo el inicio de una larga batalla?
En realidad el 11 de abril es un punto de llegada de un proceso que está enmarcado en una situación mil veces más profunda. Chile no es ajeno a las convulsiones del mundo que en estos momentos atraviesa una crisis económica y sanitaria de proporciones históricas, con revueltas y movilizaciones a la orden del día y crisis en “las alturas” como hemos visto con los partidos políticos y el trumpismo en EE.UU.
Este período no se cerrará por un proceso constitucional de estas características. Tenemos que prepararnos activamente para enormes desafíos y ante la oportunidad de retomar la pelea por terminar con este sistema capitalista de dominación, explotación y miseria y poder conquistar así una sociedad que esté al servicio de las necesidades de las grandes mayorías.
Por Paul Walder
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