Javier Milei y el anarcoliberalismo

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Las PASO – primarias abiertas, simultáneas y obligatorias – tienen el mérito de anunciar, desde meses antes, el resultado de la primera vuelta  de las elecciones generales que se realizarán en el mes de octubre, y la segunda vuelta se llevará a cabo en el mes de noviembre.

Argentina padece una crisis histórica permanente de inflación galopante  que, actualmente, se acerca a la hiperinflación, y a pesar de no ser la misma situación, muchos analistas la comparan con la crisis del “corralito” de 2001.

Las últimas PASOS, el “voto bronca” se expresó en un alto número de votos blancos, considerando la obligatoriedad del sufragio en las PASOS.

En general, las primarias repetían el bipartidismo: por un lado el antiperonismo expresado en el macrismo (de Macri) y, por el otro, el kirchnerismo, (de Kirchner). En las inmediatamente anteriores PASOS, Cristina Fernández había nominado al actual Presidente, Alberto Fernández. En agosto del presente año se disputaba el liderazgo del kirchnerismo: Sergio Massa contra el “piquetero” Juan Grabois, (amigo personal del Papa Francisco).

En representación del macrismo, la alianza de Partidos “Juntos por el Cambio”, llevaba como candidatos a Horacio Rodríguez Larreta y a Patricia Bullrich. El candidato por La Libertad Avanza, Javier Milei, venía dispuesto a quebrar el bipartidismo, encabezando el escrutinio, tanto en forma individual, como por combinación con el 30,04% de los votos; Juntos por el Cambio, que lidera Patricia Bullrich, obtuvo 18,38% de los votos, mientras que Rodríguez Larreta obtenía 11,24% de los sufragios; el total de Juntos por el Cambio fue de un 28,27%.

En el caso del kirchnerismo, Sergio Massa,  (actualmente ostenta   el cargo de Ministro de Economía), logró el 21,40%, mientras que Juan Grabois, el 5,5%.

Milei, que se había hecho famoso por su participación en   programas de televisión y radio, eligió el camino de pretender convertirse en el anti mafia política, a la cual denominaba la “casta ladrona y sinvergüenza”. En todo caso, quería ser un “outsider”, anarco-liberal, que permanentemente reitera las citas de la escuela austriaca, o bien, las concepciones de Milton Friedman, (se le compara con Jair Bolsonaro, con Donald Trump, Donald Reagan, Margaret Thatcher).

Milei en su campaña a La Casa Rosada ofrece la destrucción del Banco Central, reemplazando el peso por otras monedas, (principalmente el dólar), y la educación pública y privada se decidiría por “el voucher”. En salud, por ejemplo, los órganos se someterían a la “compra-venta”. En Economía, se privatizarían las empresas públicas. En el fondo, se implementaría el programa de los Chicago Boys, (programa seguido por Augusto Pinochet en dictadura), en forma más radical.

Milei, no sólo es un payaso que se da el lujo de insultar y calumniar a cualquiera que se atreva a contradecirlo, (el Papa Francisco comparó, en una entrevista, la situación política de Milei con la de Hitler en los años 30 del siglo pasado, cuando Alemania era víctima de la hiperinflación, a lo cual respondió con la acusación de que el Papa era un degenerado).

Entre  los líderes admirados por Milei se encuentra, entre otros, a Margaret Thatcher, provocando el rechazo de la ciudadanía, que recordaba la destrucción  y hundimiento del General Belgrano, así como la derrota de Argentina en las Islas Malvinas, también la muerte de muchos jóvenes soldados argentinos.

Al referirse a la política internacional, Milei propone romper las relaciones con China, (no tiene en cuenta que ese país ocupa los primeros lugares en las exportaciones de Argentina). El portavoz del gobierno Chino, muy hábilmente ofreció a Milei que viajara a ese país para que observara con sus propios ojos la realidad del país asiático. La estupidez anticomunista, expresada por Milei, terminaría con un aislamiento de Argentina.

Ad portas del final del gobierno de Alberto Fernández, justamente, junto a otros países, Argentina ha sido aceptada como país miembro del Brics, (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, al se agregaría Egipto, Irán, Etiopía y Emiratos Árabes Unidos). El Brics representa el 40% de la población mundial, y el 33%  de PIB. Los países del Brics harán funcionar un Banco, presidido por la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff. El ingreso de Argentina al Brics permitiría independizar este país del FMI, (se acaba de aprobar, bajo una serie de condiciones, la suma de US 7 millones quinientos mil dólares para pagar, en parte la deuda contraída con el FMI).

El retorno de la ultraderecha en América Latina pone en peligro la democracia representativa.

Rafael Luis Gumucio Rivas (El Viejo).

28/08/2023

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