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La conjura de los poderosos

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No soltarán la presa. El pueblo jalona al sistema para lograr un espacio desde donde pueda anidar un mundo mejor para sus hijos, pero el modelo globalizado, profundamente ideologizado, no pretende dar su brazo a torcer, pues al margen de sus enormes intereses, está la convicción de ser su sistema de acumulación el único viable para garantizar el crecimiento de las economías, sin darse cuenta que quienes crecen son una minoría, tan menor, que prácticamente la totalidad de la sociedad queda en riesgo de despeñarse.

 

En nuestro caso-el chileno-, la crisis integral del sistema, que se fue acumulando por varias décadas, terminó en el reventón social del 2019. La respuesta de sobrevivencia fue instintiva: dar salida a la presión por medio de una Convención Constituyente. Pero el sistema no se conformaría con poner trabas de todo tipo al buen desempeño de esa Convención: quórums altos, presupuestos bajos, apoyo tardío y, sobre todo, una guerra mediática de parte de los poderes fácticos, guerra que se ha arreciado en la medida que las mayorías populares barrieron con su base electoral en los plebiscitos y elecciones de convencionales.

 

La estrategia que se asoma, ahora, es el dar por vencedor, en los medios y encuestas, a la opción del rechazo; anticiparse al plebiscito de salida y dar forma a una especie de traspaso de la legitimidad constituyente de la Convención al Congreso, es decir desde la soberanía directa del pueblo a la soberanía interpuesta de los representantes partidistas, cosa que el plebiscito de entrada lo prohibió tajantemente.

 

Los representantes de la derecha y el amarillismo están preparándose para intervenir, en una especie de “Cocina 2.2”, la propuesta constitucional que proviene desde el pueblo en su más plena pluralidad.




 

Cuando se haya cumplido la etapa Constituyente, debe comenzar la etapa de bajada, a través de leyes, de los principios y preceptos constitucionales dados por la Convención.

Un parlamentario socialista dice que ya se terminó la fase constituyente de la Convención y se ha entrado a la fase constituyente del Congreso. Eso es como la confesión del inconsciente, pues al Congreso le corresponde otra cosa, ordenar y procesar las leyes de bajada, pero en ningún caso la de crear las normas constitucionales. Pero, por lo visto, tienen pensado usurpar el rol de constituyentes y mudar la nueva propuesta de tal forma que quede convertida en un clon de la Constitución  Pinochet-Lagos.

 

Esto sería una especie de golpe blando a la soberanía popular, en caso que triunfe el “Apruebo”. Ahora, si triunfa el “rechazo”, Chile se debe olvidar de otra Constitución que no sea la del 80, con toda su parafernalia militarista, policial y de economía transnacionalizada. Los derechos sociales y económicos quedarán en el “sueño de una noche de verano”, por largo tiempo.

 

Es tan pertinaz la voluntad de la derecha latinoamericana, que finalmente termina complotando contra todos los gobiernos que se digan progresistas. Podremos ver cómo se deshacen de Castillo en el Perú (como sucedió con la Bolivia de Morales); cómo cuestionarán las elecciones democráticas en Brasil (al estilo Trump) y cómo anularán las propuestas de cambio en Chile, tal como sucedió a Bachelet II, luego del caso Caval y la “Cocina” de Zaldívar- Fontaine- Walker-Burgos y Valdés.

 

Ésta, viene siendo una segunda oleada de la “conjura de los adinerados”: la anterior fue con Dilma Rousseff y con Evo, con Bachelet II y contra el acuerdo de paz en Colombia, propiciado por el presidente Juan Manuel Santos y combatido con una propaganda del miedo, que les dio sus frutos  en el plebiscito  de aprobación-rechazo. Algo parecido a lo que acontece en Chile con el plebiscito de salida ante la nueva propuesta constitucional.

 

Esta “conjura de los adinerados”, puede darles tiempo a los poderosos para terminar su tarea de exprimir el trabajo de los hombres de nuestras tierras y de expoliar hasta agotarlas  nuestras riquezas. La alienación por el consumo y una cultura sumisa, es posible que genere los alineamientos necesarios para una gobernabilidad conflictiva pero factible (fáctica).

Los capitalistas nacionales y extranjeros habrán acumulado tantos excedentes que se permitirán seguir dominando al estamento político y judicial sin mayores contratiempos; de esa forma irán desviando el capital hacia el exterior para ponerlo a buen recaudo o alinearse con el desarrollo de otras naciones, a expensas del  empobrecimiento indefectible de las nuestras. Es, por lo demás, lo que ha venido sucediendo con los capitales acumulados en el 1% más rico de Chile y América Latina: los impuestos no pagados (FUT), los excedentes de las mineras nacionales y transnacionales, los paraísos fiscales y el registro como empresas extranjeras, son unas pocas formas de transferir capital y no invertir en Chile, generando una economía que enriquece afuera y empobrece adentro. De otra manera no se explica que Chile, luego de haber multiplicado varias veces su PIB durante el transcurso de los últimos 30 años, retenga condiciones de miseria tan extendida y déficit tan grandes en salud, educación, cultura e infraestructura estratégica.

 

Lo único que explica que no tengamos una estructura industrial acorde con nuestros recursos básicos, es el hecho que la inversión no se está haciendo en Chile, no, al menos, en los sectores que sí generan desarrollo a mediano y largo plazo.

 

“En vez de la miseria”; “Chile, una economía de desarrollo frustrado”; “La maldición de vivir de las materias primas”, son algunos de los títulos que viene proclamando esta especie de “CONJURA DE LOS NECIOS”, y que generación tras generación volvemos a aceptar “El despojo”, “El saqueo del Estado chileno” por los mismos de siempre, para los mismos de siempre y contra los mismos de siempre.

 

Por Hugo Latorre Fuenzalida

 

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Las opiniones vertidas en esta sección son responsabilidad del autor y no representan necesariamente el pensamiento del diario El Clarín

 



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  1. Soñemos nomas gaviotas…….Mientras exista la propiedad privada(no me refiero al auto,la casa propia,a la bicicleta,el patin, la tele,etcetera,etcetera), Me refiero: A los medios de producción, la tierra,el mar,los minerales,los servicios,los bancos,del intercambio etc.etc.A la propiedad privada de la salud,educación,los ahorros de las y los trabajadores. De la propiedad privada; de la energia electrica,de los medios de comunicación de masas,etc.etc.
    Los dueños del gran capital han tenido siempre el control de todo.. y mientras no se temine con éso,todo va a seguil igual y/o peor. Y ahora para rematarla, estos sres. son propietarios de las y los políticos, de todos los lados…..
    NO MÁS AFP Y TERMINERMOS CON LOS CIRCOS CAPITALISTAS………!!!

  2. La esperanza nos ilusiona pensando que, otra vez, esa maravillosa ola del 80% volverá a repetir su votación para proponer un nuevo camino al país con la magnífica NC , resultado del trabajo de personas elegidas libremente por el pueblo. No permitan que les roben su Nueva Cibstitución!

  3. MARTES 16, Agosto 2022

    Saludos a todos,

    Expresó mi opinión a favor del Apruebo en el plebiscito Constitucional. En ese contexto, si gana el Apruebo, el origen y el contenido aprobados son enteramente legítimos, y eso le abre un horizonte al país de nuevos principios en los cuales basar su convivencia y al cual los actores del sistema político deberán atenerse.

    Entre quienes están en contra del texto, a favor del Rechazo, se va a imponer, la tesis de la derecha. Y no hay posibilidad de que la posición de centro tenga algún liderazgo en ese lugar.

    La clave más importante, es redoblar el trabajo para tener muchos apoderados que nos permitan resguardar la probidad del proceso.

    ¡APRUEBO!

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