
El presidente Donald Trump ordenó la imposición de aranceles de 25 por ciento a las importaciones de México y Canadá y duplicó el arancel sobre China a 20 por ciento. Con ello pone fin –por ahora– a las intensas negociaciones de los países vecinos y la especulación cada vez más intensa entre la cúpula económica sobre si el mandatario apretaría el gatillo comercial o no.