Manifestaciones fuera de la Municipalidad de La Cisterna por denuncias de acoso laboral
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El pasado martes, distintas funcionarias y ex funcionarias de la Municipalidad de la Cisterna, con el apoyo de distintos grupos feministas, se manifestaron a las afueras del municipio en Gran avenida, denunciando despidos masivos, acoso laboral, entre otros.
Las marchas comenzaron desde intermodal Metro la Cisterna por eso de las 15:00, para luego continuar con carteles hasta terminar en la dependencia de la repartición pública.
En una entrevista con el medio Fortín Mapocho, Isolina Acosta, coordinadora de la agrupación Mujer: Derecho y Trabajo, comentó que “El objetivo de la movilización fue visibilizar una serie de denuncias de mujeres trabajadoras y extrabajadoras del municipio de La Cisterna. Se trata de despidos masivos, denuncias por acoso, maltrato, discriminación y trabajadoras ejerciendo actualmente sus funciones sin contrato”
Según lo explicado por Acosta, las funcionarias habrían interpuesto denuncias internas, al igual que en Contraloría, pero hasta el momento no existían respuestas. De igual manera, también se han ejercido distintas acciones legales en contra del Municipio por temas como acoso, abuso laboral y discriminación.
“Algunas fueron despedidas en situaciones con claros fines políticos, acusándolas de incumplimientos graves, incluso mencionando en informes técnicos a su hijo como un problema” relata la dirigente, agregando también que “Acá se despide para ingresar a conocidos del alcalde, pagando favores personales.”
Según las mujeres afectadas, este tipo de situaciones es poco profesional y arbitraria, dado que jefaturas del municipio ignoran la trayectoria de las funcionarias y las habilidades que tienen con las personas de la comunidad y los vecinos de La Cisterna, con las que intervienen.
Por su parte, el alcalde Joel Olmos (IND), comento que no existía ningún tipo de discriminación ni violencia de genero en el municipio, mas no atendió a las protestantes, ni tuvo algún tipo de conversación con ellas.
Las denunciantes aseguraron que mientras se manifestaban, a los funcionarios que estaban laborando en ese momento, no se les permitió salir para adherir a la movilización. “Metíamos mucho ruido y el alcalde se hizo el leso, haciendo como que no escuchaba nada. Y cerró con llave las puertas del municipio para que no se sumara más gente.”
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