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Desafío en la equidad de género: Solo un 16,5% de las alcaldías en Chile está en manos de mujeres

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La participación de mujeres en los gobiernos locales en Chile ha mostrado avances en los últimos años, pero las cifras actuales siguen evidenciando una importante brecha de género en los cargos de elección popular. A pesar de los esfuerzos por fomentar la igualdad, la representación femenina en las alcaldías a nivel nacional sigue siendo minoritaria.

En las recientes elecciones municipales, solo 57 alcaldesas fueron electas, lo que equivale a un 16,5% del total de 345 municipios en el país. Esta cifra representa una leve disminución respecto al período 2021-2024, cuando se eligieron 59 alcaldesas, es decir, un 17% del total. Esto demuestra que, a pesar de los avances, aún existen barreras significativas para la participación de las mujeres en el gobierno local.

La presidenta de la Asociación Chilena de Municipalidades (ACHM) y alcaldesa Karina Delfino, destacó la importancia de continuar trabajando en conjunto para reducir las desigualdades y discriminaciones que afectan a las mujeres. «Es muy importante que trabajemos juntas y juntos por una sociedad distinta», señaló Delfino, enfatizando la necesidad de seguir impulsando la participación femenina en el ámbito municipal.

A pesar de la existencia de medidas legislativas para promover la participación femenina, como la ley de cuotas en candidaturas, la representación sigue siendo desigual. Un dato alarmante es que en las regiones de Arica y Parinacota y Ñuble no se eligió ninguna alcaldesa, mientras que en Tarapacá, Atacama y Los Ríos solo una mujer logró asumir la jefatura comunal.




En cuanto a los concejos municipales, la participación de las mujeres alcanzó solo un 33%, lo que reafirma la minoría femenina en estos cargos de representación popular a nivel nacional.

La ACHM ha promovido activamente la equidad de género en el ámbito municipal a través de su Comisión de Género y Equidad. Entre sus iniciativas se incluyen capacitaciones, congresos de mujeres alcaldesas y concejalas, y propuestas legislativas orientadas a fortalecer la presencia de las mujeres en la política local.

Entre los avances recientes destacan la Ley Karin (21.643), que establece medidas para prevenir y sancionar el acoso laboral, sexual y la violencia en el trabajo, así como la Ley Integral 21.675 contra la violencia de género y la ratificación del Convenio 190 de la OIT, que busca garantizar un ambiente laboral libre de violencia.

A pesar de estos avances, la baja representación de mujeres en las alcaldías y la disminución de su presencia en los concejos municipales reflejan la necesidad de continuar trabajando para una democracia más equitativa. La ACHM reafirma su compromiso con la implementación de políticas que promuevan la igualdad de oportunidades y fortalezcan el liderazgo femenino en la administración municipal, con el objetivo de alcanzar una representación más equilibrada y justa en el país.

 



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  1. Renato Alvarado Vidal says:

    Las leyes de cuotas son un remedio para el problema inmediato, son una transfusión de sangre para estabilizar al paciente, mientras las causas de la anemia siguen intactas. Pero averigüemos primero si existe la enfermedad.
    Veamos algunos componentes del fenómeno:
    En nuestro actual modelo político el voto popular no hace más que validar a los candidatos elegidos por los partidos políticos.
    La participación de la gente en la política se hace a través de los partidos.
    Tengo entendido que en el ingreso a un partido político no hay discriminación por sexo.
    Si el ingreso a los partidos es libre y equitativo, es cosa de ver el porcentaje de mujeres militantes.
    Si el porcentaje fuese similar a ese 16,5% significaría que representa fielmente el interés femenino en la actividad política partidista; no sería una distorsión.
    Si los porcentajes de participación y de representación fuesen muy divergentes, entonces habría algo por corregir.
    Si el porcentaje de militancia fuese en realidad así de bajo, también sería algo con necesidad de enmienda.
    Tal vez lo que hay que modificar es la modalidad de participación.
    Tal vez algo más directo, práctico y controlable pudiese ser más atractivo para las mujeres.

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