
El desarrollismo es, por vocación, negacionista en cuanto al tema ambiental: siempre lo piensa como un problema secundario y, en todo caso, como un asunto de política interior. Esta vocación contraria al ambientalismo se nutre de la insuficiencia de acuerdos internacionales para construir una economía verde a escala global. Quiero discutir hoy un ejemplo que […]