
Pescadores artesanales exigen respeto a la distribución de la merluza: 70% para el Sector Artesanal y 30% para la Industria
Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 8 segundos
En la antesala de la votación en la Comisión de Hacienda del Senado sobre el proyecto de fraccionamiento pesquero, los dirigentes de la Alianza Nacional por la Defensa de la Pesca Artesanal se reunieron con el ministro de Economía, Nicolás Grau, para ratificar su postura en la distribución de las cuotas y exigir avances en la nueva Ley de Pesca.
La reunión, celebrada el jueves 20 de marzo, reunió a los principales voceros del sector, entre ellos Hernán Cortés (CONDEPP), Sara Garrido (Corporación Nacional de Mujeres de la Pesca), Pascual Aguilera (CORANOR) y Jorge Bustos (COREPA), quienes recalcaron la necesidad de mantener los porcentajes del fraccionamiento aprobados en la Cámara de Diputados.
Un Proyecto Financiado y sin Impacto Fiscal
Hernán Cortés, presidente de CONDEPP, enfatizó que el proyecto de fraccionamiento cuenta con financiamiento asegurado. «Tras la última reunión de la OROP-PS, se aumentó la cuota global de jurel en un 25%, garantizando que no habrá impacto negativo en la recaudación fiscal», sostuvo.
Asimismo, rechazó los argumentos de la industria pesquera que califican la iniciativa como una «expropiación de derechos adquiridos», señalando que no existen razones técnicas ni económicas para seguir postergando su aprobación. «El senador Felipe Kast ha puesto en tabla el proyecto cumpliendo su compromiso, por lo que no debería demorar su paso por la Comisión de Hacienda», agregó.
Distribución Equitativa y Defensa de la Pesca Artesanal
Sara Garrido, representante de la Corporación Nacional de Mujeres de la Pesca, fue enfática en su posición: «No vamos a tranzar en la merluza común: 70% para la pesca artesanal y 30% para la industria».
Desde la Alianza Nacional por la Defensa de la Pesca Artesanal, se ratificó la necesidad de mantener la distribución de las cuotas de captura en distintas pesquerías, estableciendo:
- 70% para la pesca artesanal y 30% para la industria en el jurel.
- 70% artesanal y 30% industrial en la merluza común.
- 90% artesanal y 10% industrial en la jibia.
Según Cortés, la industria ha intentado bloquear el proyecto con «argumentos falsos», y denunció que «históricamente, la distribución de las cuotas ha favorecido a los grandes conglomerados en desmedro de la pesca artesanal».
Demora en la Nueva Ley de Pesca y Exigencias del Sector
Pascual Aguilera, presidente de CORANOR, expresó su preocupación por el lento avance de la nueva Ley de Pesca en la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados. «Uno de los puntos más sensibles para el sector es la creación de una plataforma social para pescadores artesanales, financiada con la recaudación de las licencias transables de la pesca industrial».
Aguilera destacó que este sistema es fundamental para mejorar el bienestar de los pescadores y sus familias, asegurando que la gran industria pesquera «se ha beneficiado por décadas de un sistema que le ha entregado el control de las cuotas de captura a costa de la pesca artesanal».
Por su parte, Sara Garrido hizo hincapié en la necesidad de que la legislación incorpore una perspectiva de género, reconociendo el rol de las mujeres en la pesca artesanal. «Las actividades conexas realizadas por mujeres han sido históricamente invisibilizadas en la legislación pesquera. Es imprescindible que la nueva Ley de Pesca y el fraccionamiento se aprueben con un enfoque de equidad de género», subrayó.
Exigencia al Congreso: No Más Dilaciones
Los dirigentes aseguraron que el subsecretario de Pesca, Julio Salas, presente en la reunión, comprometió su apoyo para que la plataforma social tenga prioridad en la discusión del nuevo proyecto de Ley de Pesca.
Marcelo Soto, también vocero de la Alianza, advirtió que los pescadores artesanales no aceptarán nuevas postergaciones en la tramitación de estos proyectos: «Hemos sido claros, no aceptaremos más dilaciones».
Finalmente, la Alianza Nacional por la Defensa de la Pesca Artesanal emplazó al Congreso a actuar con responsabilidad y no permitir que los intereses de la industria continúen obstaculizando las demandas históricas del sector artesanal.
Hugo Bauer says:
Yo estoy jubilado, pero fuí marino mercante y le tengo gran respeto y admiración a los pescadores artesanales. Lo que no concuerdo en absoluto sí, es la forma violenta e irracional como han hecho sus protestas. Incendiando vehículos de carabineros, golpéandolos e hiriéndolos, tratando de bloquear el ingreso de barcos al puerto arriesgándose incluso ellos mismos, intentos de asaltar una lancha de la policía marítima que sólo estaba ahí cumpliendo su obligación para proteger la navegación. Por otro lado, la pesca industrial produce miles de lugares de trabajo tanto en tripulantes de sus barcos como en sus fábricas en tierra y muchos de sus tripulantes fueron pescadores artesanales. Protestar por sus intereses si, pero de una manera civilizada