Crónicas de un país anormal

Piñera, el nuevo jarrón chino de La Moneda

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El ex Presidente Ricardo Lagos, en pleno escándalo de los sobresueldos, sacó de la manga la metáfora sobre la equivalencia del escándalo con el robo de un jarrón chino, muy bonito, pero a la vez inútil.

 

Quién iba a creer que dos decenios después la brillante comparación del catedrático Lagos calzaría, a la perfección, al Presidente Piñera: aún le faltan dos años para expirar su mandato y ya no tiene programa que cumplir, ni tarea que realizar, y en el Palacio de La Moneda es como una decoración tan fina como el “jarrón chino”, (me huele que lo compró en el “Mercado de las Pulgas”, pues parece más falso que un pachulí).

 

Como un niño malcriado, sus ministros tratan de mantenerlo callado, pues cuando habla enciende la pradera.  Nada se gana con que los asesores del “segundo piso” le escriban con letras gigantes el texto a leer, pues él y sin que nadie lo note, el escrito lo usa en el baño de don Santiago Portales, (administrador de la Casa de Moneda y padre del tirano Portales).

 

Si se trata de la vocería en temas constitucionales, el ministro Blumel da la cara y no lo hace mal; cuando hay que recurrir a la economía, el podio lo ocupa el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, (muy empático para anunciar pésimas noticias); la vocera de gobierno, Karla Rubilar, un poco desprolija, también cae bien con su acento de huasa de Renca. El Presidente, por consiguiente, se hace innecesario, además no sirve para nada, (yo le había aconsejado unas buenas vacaciones en Francia y en otros países europeos, pero el muy terco no me ha hecho caso).




 

El Presidente Piñera perdió a sus dos escuderos durante este mes, ¿cuál de los dos más pesado y falto de luces, su primo Andrés Chadwick o Felipe Larraín? (Este último ofrece flores a la pobre mujer que lo soporta).

 

Y como si fuera poco, el Presidente ya no será el “capitán planeta”, al verse obligado a anular la APEC y la Conferencia climática, que ya estaba avanzada su preparación y, además, ya había pensado sobre sus “piñericosas” para caerle simpático a sus invitados, aunque nadie le saca el muy merecido “premio limón”.

 

Si en Chile existiera el parlamentarismo, como en Italia, por ejemplo, tal vez Sebastián Piñera pudiera desempeñar un buen papel – reina, pero no gobierna -, con la reina Isabel no habría comparación posible, (a Piñera no le vienen bien los sombreros de tortas de frutilla que lleva la reina).

 

Si Chile tuviera un régimen semipresidencial también Sebastián Piñera estaría marcando ocupado, pues E. Macron, en Francia, manda mucho más que su Primer Ministro; y para qué hablar de Vladimir Putín, que no sabemos si es Presidente, Primer Ministro, o Zar, o las tres juntas.

 

El Presidente pertenece a una nobleza de baja alcurnia, (en la monarquía francesa los burgueses devenían en nobles, sólo que en Chile no hay muchos títulos a la venta, por ejemplo, el marquesado de La Ligua pertenece a los Irarrázaval; el condado de Curicó, de comienzos del siglo pasado, a los Lazcano; el principado de Santiago pertenece a los Walker; incluso, el de Tongoy, La Serena y Coquimbo, es disputado por Chadwick y los Viera-Gallo), por consiguiente, así la familia real de Mónaco, en su rama masculina, no sea muy agraciada, Sebastián Piñera no lo hace mal con sus arrugas en las arrugas, que se pronuncian con los grados de tensión a los cuales está sometido.

 

Los chilenos no deberíamos ser tan malagradecidos, (mal que mal elegimos dos veces al actual mandatario), por qué no pensar que sus años de abuelo choco sean los más felices de su vida: en La Moneda, el “segundo piso debiera dedicarse al Palacio del Zorro, para solaz del abuelo y sus adorables nietos, especialmente León, su predilecto, y así los días con sus noches el abuelo Sebastián haría de caballito, montado por todos sus nietos y nietas. Por su parte, su mujer, Cecilia Morel, conversaría con sus amigas durante los te- canasta sobre el filosófico tema respecto del sexo de los alienígenas, como también si serán feos o buenos mozos. A lo mejor, la gama de los colores verdes y con antenas, podrían convertirse en el grito de la moda.

 

Un país con un Presidente inútil y, además, ocioso, a lo mejor podría ser la persona que Chile necesita: se ha probado que quienes trabajan 24 horas sobre 24 terminan agotados, deprimidos e incapaces, (los dichos de que “el ocio es la madre de todos los vicios”, y que “el que quien no trabaje, no coma”, pero también sabemos que el ocio es el padre de la filosofía y que – según Platón – ellos, los filósofos son los que deben gobernar. Calderón de la Barca decía que “la vida es sueño y los sueños, sueños son…” Se concluye que la muerte es dormir sin soñar, y quedarse dormido soñando sería como “los sueños despiertos”, de Ernst Bloch.

 

Rafael Luis Gumucio Rivas (El Viejo)

19/11/2019         

           

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  1. Es que el «jarrón chino» de Piñera es el doble de tamaño que el de Lagos
    Es un «jarrón» además adornado con flores secas de loto, y es irrompible también.
    Este jarrón lo lleva Piñera cuando va de viaje por el mundo haciendo sus negocios raros
    Ester > Piñera es muy aficionado a reír cuando ve verdes billetes nuevos-
    Aj ! Lagos fue un aprendiz de hechicero ! Piñera está titulado…

  2. Cómo es posible que no entiendan que 41 horas es mucho mejor que 40 horas ?Cómo es posible que no entiendan que convención constitucional es mucho mejor que la impronunciable ……….constitucional ? C eomo es posible que no entiendan que terminar con las carboneras el 2030 es mucho mejor que terminarlas ahora ? cómo es posible que no entiendan que mi jarrón chino es más fino que el de Lagos?……Sebastián , deja de gastarme el espejo y atiende a tus nietos…….

  3. Saludos a todos

    ASAMBLEA CONSTITUYENTE

    Ya es tarde, para volver atrás a nuestro camino. Robaron demasiado, ahora es el tiempo de los trabajadores, pensionados, dueñas de casas, estudiantes, Ex-PP y de los hermanos mapuches.

    Van a tener que devolver los 26.000 dólares “per capita”, que se embolsaron. También Chile necesita  cambiar todo su parlamento y disminuir las dietas millonarias de los políticos. ¿Se suponía que el aumento de senadores y diputados no implicaría un mayor gasto?

    ¡DESPIERTA CHILE, DESPIERTA!!

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