Columnistas

La candidatura de Boric: ¿el día o la noche?

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 53 segundos

La estrategia del candidato Gabriel Boric para canalizar su legítima vocación por el poder, falla de frentón cuando intenta reemplazar a la exConcertación en su función de bisagra que busca soluciones a la crisis neoliberal con aquellos que perfeccionaron ese mismo neoliberalismo.

Olvida que el recetario concertacionista fracasó a juzgar por lo bien asentado que dejaron el modelo luego de cuatro de sus gobiernos, más el intento fallido, más bien fracasado, dé ese paso en falso nombrado Nueva Mayoría.

Llaman la atención los esfuerzos del candidato por dar señales a la candidata Narváez, que no ha ganado siquiera una elección de curso, Provoste dixit, y salida solo de la voluntad extraña, ausente y lejana de Bachelet.

Es raro que no considere la amplísima bronca que ese conglomerado genera en parte importante del censo.




Puede suceder que los restos humeantes de la exConcertación terminen, para desgracia del joven político, apoyando su candidatura, lo que le va a significar como resultado, más cara la vaina que el sable.

¿Se olvida Boric que esa gente es la responsable de lo que la mayoría quiere superar?

¿Se olvida que fue precisamente la Concertación la responsable de haber salvado al dictador de la justicia europea y haber perfeccionado y legitimado su legado?

Tanto o más que los amigos, son los enemigos quienes definen a un político que dice obrar desde principios y no desde el acomodo.

Hasta este momento, por la ineptitud de muchos dirigentes sociales que podrían haber hecho algo más que desfilar, no se veían opciones interesantes.

Estas se comienzan a develar por la impensada irrupción de la Lista del Pueblo, que, como sea, dividida, convulsionada, enemistada, mostró dos certezas iniciales: no todo se resume a la gestión de los partidos políticos del orden, y que cuando el pueblo sale a la pelea, las cosas tienden a moverse.

Ese ejemplo debería cuajar en el futuro mediano.

El sistema de partidos políticos tal como lo conocemos es el responsable directo de la crisis que no han podido sostener sino con la represión y los acuerdos truchos que dejan a la gente que pone su sacrificio en medio del sándwich.

Y, aunque ahora le pese, Gabriel Boric no podrá desentenderse de su responsabilidad al haber firmado un acuerdo que criminaliza a quienes pusieron el pecho a las balas en un trance histórico.

Lo interesante del momento, en efecto, es el inicio de un cambio de ciclo tantas veces anunciado, caracterizado por la irrupción de un actor que estuvo treinta años detrás de las bambalinas: el pueblo, la gente llana, en una perspectiva de poder, aunque muy tímida e inorgánica aún.

Sin embargo, se mueve.

La estrategia que superará este y todos los momentos grises y amargos no va a salir sino de la solución de la contradicción entre neoliberalismo y democracia, que es el pálpito que hoy se agita en la Convención Constituyente.

No de una ExConcertación/Nueva Mayoría rumiada, aunque sea que esta nueva masticación la hagan personas jóvenes y de buenas intenciones, como el candidato Boric.

La actual situación: el pueblo en una buena posición, la derecha acorralada, la exConcertación en un proceso acelerado de desguace, necesita que la izquierda viva su crisis y transite de esa oscuridad extraña que para algunos es porque viene la noche y para otros es porque amanece.

 

Por Ricardo Candia Cares

 

 

Síguenos:
error1
fb-share-icon0
Tweet 20



Escritor y Periodista

Related Posts

  1. Es fácil ser general después de una batalla; el análisis coherente y racional que se puede desprender de los acontecimientos políticos últimamente, es comenzar a preguntarse : Hasta donde esta dispuesto llegar el anticomunismo en Chile , para evitar que un representante del pueblo llegue a la Moneda?
    Acaso Boric no obtuvo votos de la derecha , la dc y parte de la concertacion?. O es que ese dia esta lloviendo y los votos caían del cielo? De una cosa estoy seguro, el cuarto poder , ya esta coludido con el resto de los poderes facticos de este País para evitar que las ideas que verdaderamente están al lado del pueblo, puedan desarrollarse y conseguir esa ansiada equidad, por otro lado siguen los mismos periodistas (entre comillas) de siempre , en los mismos medios, bajo la misma ala y vendiendo se al mejor postor; es decir , prostituyéndose, después de todo ellos y ellas , no tienen problemas económicos, venden sus inventos a muy buen precio.

  2. Felipe Portales says:

    Lo peor de Boric es que con su conducta del 15 de noviembre de 2019 desarrolló un rol crucial -según lo que mostró la TV en su diálogo de pasillo con el UDI Juan Antonio Coloma- en la subordinación de la generalidad de la oposición al diseño fraudulento de impedir la aprobación democrática de una nueva Constitución (por mayoría); al entregársele a la minoría (de la derecha tradicional o de las dos derechas combinadas) un virtual poder de veto sin distinción entre las dos opciones consideradas engañosamente presentadas en el plebiscito de octubre de 2020 como muy distintas: «Convención mixta» y «Convención constitucional». Y esto ¡sin que la generalidad de los ciudadanos lo supiese, dada la eficaz autocensura de los medios tradicionales de comunicación, controlados por los grandes grupos económicos al respecto! Y más grave aún, Boric con ello sobrepasó soberbiamente sus atribuciones partidarias sumándose sin autorización ni representatividad de su Partido Convergencia Social a la suscripción de dicho acuerdo entreguista; con lo que terminó quebrando dicho partido, dado que muchos de sus militantes no aceptaron una vulneración tan grave y flagrante de la disciplina y del respeto partidario, encabezados por Jorge Sharp. Todo ello generó como consecuencia varias manifestaciones de repudio a su actuar en ese momento.

    Pero, peor aún; Boric, con lo que quedó de su partido, volvieron a traicionar al movimiento popular de protesta; al sumarse a la aprobación de la represiva ley antibarricadas presentada por el Gobierno de Piñera y que aumentó la represión que pudo emplear el Gobierno y los Tribunales en contra de los protestantes.

    Por lo que Ricardo Candia tiene toda la razón. La precandidatura de Gabriel Boric no representa para nada a la mayoría popular que desea un efectivo término del «modelo chileno»; del modelo de 30 años, que tanto nuestro recordado Ricarte Soto, como José Maza han definido magistralmente como el que ha generado «la Corea del Norte del capitalismo».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *