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A propósito de algunos incendios en la zona, el presidente avanza en acusar sin pruebas ni juicio de por medio.

Contrariando no solo la presunción de inocencia, sino que lo básico de la investigación: probar quienes de verdad fueron los culpables, Gabriel Boric apunta con el dedo. Esto es obra de mapuche.

Puede ser o no ser, pero mientras no se sepa fehacientemente no se puede acusar sobre la base de presunciones o prejuicios.

¿O tratándose de mapuche sí se puede?




¿Valdrá el criterio presidencial para las infinitas veces en que los terratenientes han quemado rehues o inundado cementerios mapuche? ¿O no es lo mismo?

Cuando al presidente le falta razón, enarbola razones.

Boric se ve obligado a decir lo que los poderosos quieren escuchar. Y propone medidas que han sido fracasos sonados durante varios siglos. Siempre esas medidas que ahora remeda Boric han sido impuestas por el usurpador, esos que se robaron la tierra el agua y todo lo demás y no han servido de nada más que para facilitar el despojo.

Lo que ha dicho, aleccionado por la ultraderecha, es calcado a lo que han dicho todos los poderosos de todos los tiempos desde que se establecieron los primeros gobernadores españoles en el sur del reino.

Es cosa de ver las reacciones de los voceros ultraderechistas y su satisfacción no por lo que el ejecutivo hizo en Temuco, que hasta ahora es nada, sino por lo que dijo: sus definiciones ideológicas que disparan a diestra y siniestra y que atizan el fuego del conflicto al que está llamado a apagar.

Si el presidente se propusiera agudizar el conflicto en la zona sur, no lo habría hecho tan bien. La violencia ha sido impuesta siempre por el usurpador. Y cuando el mapuche se resiste y combate por medio igualmente violentos, corre a llorar su indefensión.

La violencia como vía de solución, ha fallado puntual e inevitablemente en trescientos años.

Pero hay más. Al presidente se le pasó la mano en su intento por quedar bien con los poderosos.

Comparar actos delictuales con lo que hicieron los nazis, es un exabrupto que le va a salir caro tarde o temprano.

Los nazis basaron su ideología considerando que ciertas personas no tenían derecho a nada y para el efecto arrasaron con ellas y los encerraron en campos de concentración o los enterraron en fosas comunes.

Sobrevalorando una supuesta raza superior, intentaron eliminar de la faz de la tierra a las, según ellos, razas inferiores y gente indeseable. Les quitaron su tierras y sus pertenencias, les prohibieron sus idiomas y cultura y los encerraron en guetos.

Curioso ¿no? El mapuche ha sido perseguido por razones y medios bastante similares.

El presidente obvia la historia que está en los orígenes de la violencia y se apresta a dotar a las fuerzas represivas con muchos y más letales medios, como si alguna vez las armas hubieran servido de algo que no haya sido para causar más dolor y muerte.

Desde siempre ha sido el Estado el precursor de esos dramas que no han sido mostrados en toda su inhumana gravedad solo porque se trata de indios, gente despreciable, a quienes el poderoso jamás le ha asignado el valor inherente a toda persona humana.

Han sido solo indios, ignaros, flojos, sucios y borrachos. Y ahora, nazis.

 

Por Ricardo Candia Cares

 

 

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Las opiniones vertidas en esta sección son responsabilidad del autor y no representan necesariamente el pensamiento del diario El Clarín

 



Escritor y periodista

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  1. Felipe Portales says:

    Estimado Pedro: Me imagino que se refiere usted a la petición totalmente improcedente que le hizo Boric al gobierno argentino -a solicitud de la UDI- para obtener la extradición de Galvarino Apablaza. ¡El mismo Boric que hace pocos años se puso alegremente una polera con el rostro acribillado de Jaime Guzmán!; y que en un insólito viaje a Paris como diputado fue a entrevistarse con Marcelo Palma Salamanca, acusado de ser uno de los asesinos del ex senador…

  2. El Sr. Presidente, Boric, se pasó de revoluciones y se tiró la cadena del water a si mismo…..que porquería de poesía está leyendo en esta nueva etapa de su vida, para acusar de nazis a los mapuche? Si realmente lo dijo , este joven, soberbio en su posición altísima, no puede ser ejemplo para la juventud progresista chilena ni extranjera; por la boca muere el pez y en boca cerrada no entran moscas, que antes se alimentaron de excrementos KKKast. Hasta que demuestres que no eres un miserable, eres boric con minúscula.

  3. Pero qué otra cosa se puede esperar, desde su viaje a Buenos Aires, lo unico que a demostrado que es un mozito de la UDI y del sistema ultra neoliberal.
    Da verguenza hajena.

  4. Nestor R. Marin-Tobar, Ph.D Agricultural Science, Phytopathologist, Expert in Rural Development and Renewable Energy. says:

    Muy interesante todo lo que se escribe en este medio. En el fondo todos los que escriben tienen algo de razon, y me gusta bastante los temas que se tocan los cuales son tan controversiales y dificil de entender, mayormente de los problemas que se arrastran, por lo menos de tres siglos. El problema de la Araucania es un problema tan serio, tan grave, donde se ha instalado una verdadera mafia, cada vez mas grave, a medida que pasan los siglos. Nadie va a poder parar el ritmo que llevan las mafias asolapadas desvastando los bosques nativos, que general tantos miles de millones de dolares, y reemplazandolos por pobres bosques de pino, que se talan a una edad muy prematura, lo que da por resultado una mugre de madera…..claro esta que esto lo hacen para taparle el ojo al macho, ya que esa madera de pino es tan ordinaria que toda se queda en el pais, y la madera fina, toda va a parar a la exportacion. Los Mapuches solos nunca van a poder recuperar sus tierras, y lo que aparece derrepente, como gran cosa, es solamente una migaja para tranquilisarlos un poco. El Presidente Boric, no deberia haberse hecho presente sino llevaba una presentacion logica y razonable, fue a puro meter las patas.

    • Don Felipe, seamos justos en las calificaciones que hacemos: Chile no es pobre, en el sentido moral, puesto que un país es solamente el terreno en que forma una nación, por lo tanto, lo que es pobre, en el sentido moral, es la mayoría que forma esta nación, pero… ¿cómo llegó esta mayoría a esta decadencia? ¿ por el pase mágico de un mandrake? No, don Felipe, esto tiene una explicación social y política y usted y muchos lo sabemo, la explicación política, si asi le pudieramos llamar, a la pérdida de la democracia en un golpe militar y civico sangriento que impuso durante 17 años una ideología individualista totalmente alejada de los principios democráticos y de compasión por los mas desafortunados. y no solamente esto constribuyó a esta nueva sociedad sin principios de solidaridad, sino que fué normalizada y afirmada por todos los años de la supuesta democracia de gente que se vestía con la ideología de izquierda y que no eran otra cosa que gobiernos de derecha, y por gobiernos de esta misma idelogía como en el caso de los gobiernos de piñera. Todo esto constribuyó para que una total mayoría de chilenos nacidos durante la dictadura y durante los gobiernos post dictadura, se desarrollaran en este sistema y es lo único que conocen y cualquier problema que les acaece en sus vidas, con seguridad los van tratar de resolver dentro de este sistema. Chile no es pobre, en el sentido moral, Chile es lo que es y es lo que es por una imposición brutal, que no permitió el desarrollo de otras ideas, viejas o nuevas. Lo único que siento, don Felipe, es una pena inmensa de que mis compatriotas tengan una vida intelectual y física tan limitada que cualquier cosa que pasa en el mundo que no tiene lo que ellos comprenden como democracia, sea interpretada como dictaduras de izquierda, y hasta usted, don Felipe, una persona intelectual progresista como muchos chilenos, han tomado la bandera del neoliberalismo capitalista para combatir y denostar a países progresistas que estan tratando de ser libres en su soberanía y lo que muchos hacen es demorar más y más la unificación de la gran Patria Morena, libre, solidaria, soberana y socialista, socialista en el sentido moderno en que los trabajadores son dueños de sus destinos a través de un estado que refleje estos sentimientos y que además permita las libres decisiones de sus ciudadanos. En estos momentos no se puede negar que este sentimiento libertario y democrático en Chile está reflejado en una mayoría que solamente quiere esta sociedad de consumo neoliberal capitalista y la respeto, pero eso no me obliga a quedarme callado.

    • Serafín Rodríguez says:

      La extrema derecha no lo va a decir porque recibiría el boomerang de vuelta en el hocico. Con la mierda que Boric tiene en la cabeza, de seguro que cree que decirlo, fue un acierto.

  5. ¿Y…qué esperaban de boric? ¿Algo diferente de los gobiernos concertacionistas, o de los gobiernos de piñera? ¿Son racistas la mayoría de los chilenos? Si no lo fueran, ¿no creen ustedes que la mayoría estaría apoyando a los Mapuches por lo que significa esta raza en su lucha en contra de los poderosos y ladrones? Pero no lo están, porque a la mayoría le da un cuesco lo que pasa fuera de sus limites familiares, y este es el resultado en parte de la individualizacion que conlleva el neoliberalismo; si a mi me va bien, que se vayan a la cresta los demás. Es un hecho, una verdad indiscutible, los Mapuches, en este Chilito, son los únicos que todavía tienen bien clarito el derecho que da la soberanía sobre la tierra en que ellos han estado por siglos y siglos y siglos… Y lo único que estos gobiernos tendrán que aplicar para eliminar este «problema», es la solución Nazi: el Holocausto del Pueblo Mapuche y de apoco lo están haciendo. PS, dicen que boric visitó la Araucanía, lo mismo que hacía hitler con los países conquistados. ¿Coincidencia? Ustedes saquen conclusiones.

  6. Serafín Rodríguez says:

    El hecho es que Arauco se encuentra en en un estado de guerra reivindicatoria, una guerra de sucesivos ataques y retiradas, la misma estrategia que usó Lautaro hace poco más de 4 siglos y medio. Hoy los focos de ataque son múltiples y geográficamente variables de modo que es prácticamente imposible anticipar respuestas realmente efectivas. Para terminar militarmente con esta guerra, habría que iniciar un copamiento total de la Macrozona Sur, una nueva «Pacificación de la Araucanía», de manera masiva e indiscriminada, un genocidio que fue posible en el S. XIX pero que hoy es absolutamente inviable. Lo único que se puede hacer es implementar un plan de acuerdos con quienes dirigen la guerra reivindicatoria, algo a lo cual los gobiernos anteriores y el actual se han negado pero aunque les cueste aceptarlo, es la única salida posible. Además, para lograr dichos acuerdos se necesitan propuestas claras y concretas, bien estudiadas, nada de lo cual el gobierno de Boric parece estar en condiciones de formular, ya sea porque carece de la preparación y competencias para ello o por su tendencia a dar prioridad a la represión en vez del diálogo tal como ha demostrado tanto en los hechos como en sus discursos. En todo caso, cualquier acuerdo que no sea con quienes dirigen la guerra reivindicatoria de Arauco, no va a tener ninguna durabilidad y el conflicto va a persistir. La negociación de buena fe y el umplimiento de lo que eventualmente se acuerde es el imperativo político y moral que no se puede seguir postergando y que hay que asumir de una vez por todas.

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